¿Qué balance hace tras un año largo como presidente de la SNE?
Sinceramente, pienso que el balance de actividades realizadas por la Sociedad Nuclear Española en este último año ha sido muy positivo y, debo decir, que los logros alcanzados han sido posibles gracias a la entrega y dedicación de las personas que, voluntaria y desinteresadamente, colaboran año tras año formando parte de nuestras Comisiones permanentes y de nuestra Junta Directiva.
Desde la última entrevista, hace ya un año, hemos celebrado la 41 Reunión Anual de la Sociedad en La Coruña -en septiembre de 2015-, la Jornada de Experiencias Operativas 2015 y Perspectivas de las Centrales Nucleares para 2016 -que mantuvimos en Madrid en febrero de este año- y la Jornada Técnica sobre Calidad en las Instalaciones Nucleares -que tuvo lugar en Valencia el pasado mes de abril-. Con estas actividades, hemos asegurado el contacto y el intercambio permanente de experiencias e información entre los profesionales del sector.
Por otra parte, y con el objetivo de facilitar la incorporación de jóvenes al sector nuclear, me gustaría destacar, entre la variedad de actividades realizadas este año, el lanzamiento de un nuevo proyecto que hemos denominado “Atracción de Talento”, concebido para acercar a los jóvenes interesados en la tecnología nuclear a las actividades que realizamos, tanto en la SNE como en las empresas que forman parte de la misma, mostrándoles de primera mano las capacidades y diversidad de actividades que les pueden asegurar un excelente desarrollo profesional a través de nuestro sector.
En estrecha colaboración con la Comisión de Jóvenes Nucleares de la SNE, e intentando dar solución a la preocupación de mayor calado entre los jóvenes, este proyecto ha creado un portal centralizado de ofertas de becas, prácticas y empleo donde las empresas del sector pueden publicar sus ofertas para la realización de prácticas y la información que consideren sobre los procesos de selección abiertos. De este modo, los jóvenes socios dispondrán, a través de un acceso inmediato y centralizado, de una amplia información de las vacantes disponibles en las diferentes empresas o instituciones que conforman el sector nuclear y podrán asesorarse de primera mano, a través de los profesionales de la SNE, sobre los trabajos que mejor se adaptan a sus intereses, aptitudes y capacidades.
Una de las primeras iniciativas del proyecto ha consistido en la realización de un concurso por equipos de jóvenes, a los que se les ha solicitado la elaboración de un estudio sobre la percepción social de la energía nuclear y el papel que la Sociedad Nuclear Española puede desempeñar. Los ganadores de este primer concurso han sido cuatro jóvenes que, como premio, serán protagonistas invitados en la 42 Reunión Anual que se realizará este año en Santander.
Además, en el marco de la próxima Reunión Anual, lanzaremos un programa de mentoring que facilite a los jóvenes que participen en el mismo una visión completa del sector de la mano de profesionales senior que hayan desarrollado su carrera profesional en diferentes empresas o instituciones relacionadas con programas nucleares.
Por último, mencionar que, como todos los años, la Comisión Técnica ha otorgado nueve becas por un importe total de 23.400 euros a los ganadores de las más de treinta solicitudes presentadas, que les ayudarán a satisfacer los gastos de matriculación para cursar másteres en especialización nuclear.
En resumen, un año muy activo con una dedicación especial a la atención a nuestros socios más jóvenes, en beneficio de todos.
Un año más, la energía nuclear fue la fuente que mayor contribución realizó al sistema eléctrico español. Los resultados son muy positivos.
Efectivamente, son ya seis años consecutivos en los que la energía nuclear ha sido la fuente de generación que más ha contribuido a la producción eléctrica española.
Concretamente, en el año 2015 la energía nuclear produjo el 20,3% del total; seguida del carbón, con un 20,1%; la eólica, con un 17,5%; la hidráulica, un 11,1%; ciclos combinados, con el 10,8%; cogeneración y tratamiento de residuos, también con el 10,8%; fuel, 2,4%; solar fotovoltaica, 3%; solar térmica, 2%; y biomasa y residuos, el 2%.
Cabe destacar que, en 2015, la segunda fuente de generación ha sido el carbón, a diferencia de 2014 donde la segunda fuente fue la energía eólica. Con ello, la producción libre de emisiones de CO2 ha disminuido a un 56%, frente al 61% que se produjo en 2014. De dicho 56% sin emisiones, el 36% fue conseguido gracias a la producción nuclear.
Las fuentes de energía renovable son un medio importante para reducir las emisiones de CO2, pero no son la solución total. Debido a su baja densidad de energía y a su naturaleza intermitente, no pueden, por sí mismas, alcanzar la reducción necesaria de emisiones que se solicita a la producción de electricidad. La energía nuclear, como fuente de energía complementaria y fiable que no emite CO2, debe ser parte de la “cesta energética” disponible para generar la electricidad que nos permita disponer de una red eléctrica estable y fiable, y, al mismo tiempo, reducir las emisiones de CO2.
Además, las centrales nucleares españolas siguen operando de forma segura y fiable, y cumpliendo los objetivos medioambientales.
Por supuesto, los buenos resultados de la producción nuclear que hemos mencionado anteriormente se han conseguido gracias a que cada central nuclear española ha estado, por término medio, 7.272 horas conectada a la red eléctrica, de las 8.760 horas que tiene el año; lo que significa un 90,26% de factor medio de operación y un 88,26% de factor medio de carga. Este funcionamiento tan fiable de las plantas es fruto de los programas de mejora continua implantados en todas ellas, de la eficaz gestión que se lleva a cabo, de las importantes inversiones dispuestas, de la exigente formación del personal, y de la permanente modernización y el riguroso mantenimiento de las instalaciones. Y quiero añadir que todo lo anterior se desarrolla con el soporte permanente y comprometido de las empresas de altísimo nivel que constituyen el sector nuclear español.
Además, y como muestra de su funcionamiento seguro, durante todo el año 2015 las centrales españolas han permanecido en la columna de “respuesta del titular”, la de más baja significación para el riesgo, en el Sistema de Supervisión de CCNN que publica en su web el Consejo de Seguridad Nuclear.
Mención aparte merece la situación de Garoña, que lleva más de tres años parada por decisión de sus propietarios. En su opinión, ¿se abrirá o se desmantelará?
Como es sabido, Garoña se desconectó de la red eléctrica en diciembre de 2012 por razones económicas, y no técnicas ni de seguridad. Posteriormente, en 2014, Nuclenor decidió solicitar la renovación de la autorización de explotación hasta 2031, ya que consideraba que este plazo hacía viable el proyecto y proporcionaba la estabilidad y certidumbre adecuada para acometer las inversiones precisas, con lo que se puso en marcha el proceso de evaluación de dicha solicitud por el Consejo de Seguridad Nuclear; proceso que, a fecha de hoy, aún continúa.
Una vez finalice este proceso, tocará analizar las condiciones que se establezcan para su continuidad y la previsión del mercado de generación eléctrica a futuro, y se adoptará la decisión definitiva sobre la central.
Entre tanto, Nuclenor continúa realizando los trabajos necesarios para la obtención del informe preceptivo por parte del CSN, así como en el resto de actividades ordinarias de mantenimiento y supervisión de los equipos de la planta, al objeto de mantener en todo momento las requeridas condiciones de seguridad de la instalación.
Por su parte, los trabajadores que componen las plantillas de Nuclenor y de las empresas que hacen posible el funcionamiento de la central han afrontado con gran profesionalidad la situación a que se han visto abocados, sin que se haya visto alterado un ápice el funcionamiento de la central. Los indicadores de los últimos cuatro años de Santa María de Garoña confirman la seguridad de la planta. En 2016, Garoña sigue manteniendo en verde todos sus indicadores y hallazgos de inspección desde la puesta en funcionamiento en 2006 del Sistema Integrado de Supervisión de Centrales (SISC) por el CSN.
En este punto, quiero agradecer la colaboración y apoyo prestado por la infinidad de personas y empresas que han respaldado, y lo siguen haciendo, el proyecto de operación a largo plazo de Santa María de Garoña.
Por otra parte, nuestra industria nuclear también es competitiva y tiene una gran capacidad exportadora.
No cabe duda. La industria nuclear española tiene una participación muy destacada en la implantación de proyectos, operación, mantenimiento y todo tipo de servicios en las instalaciones nucleares españolas. Además, participa en nuevos desarrollos y programas de I+D+i, a los que dedica anualmente cerca del 2% de sus ingresos totales; esto supone más del doble de lo que destinan otras empresas de otros sectores en España.
Los estudios realizados confirman que el sector nuclear español está formado por una industria competitiva, consolidada y experimentada, que cubre toda la cadena de valor de la actividad nuclear -desde los estudios iniciales, el diseño conceptual, la construcción, la fabricación de combustible, el desarrollo de ingeniería en todos los ámbitos, el suministro de equipos y componentes, la formación, la operación y mantenimiento, la inspección de componentes, los servicios de todo tipo y la gestión de residuos nucleares hasta el desmantelamiento de las instalaciones-.
No quiero dejar de mencionar la importante contribución de este sector al desarrollo económico y social, mediante la generación de empleo de calidad, a tiempo completo y de alta cualificación. Aproximadamente, 30.000 puestos de trabajo entre el directo, el indirecto y el inducido. Podemos decir con satisfacción que las empresas del sector constituyen un importante motor de desarrollo de la actividad económica y generador de empleo de calidad.
Y nuestras empresas están muy presentes en proyectos de más de 40 países.
Así es. En estos momentos, la industria nuclear española desarrolla su actividad en más de 40 países.
Con la experiencia adquirida en las instalaciones españolas, nuestra industria nuclear está preparada y lleva años ampliando su ámbito de actuación a otros países.
Actualmente, las empresas del sector nuclear español gozan de un gran prestigio nacional e internacional, y algunas dedican hasta un 80% de su actividad a la exportación.
En el Acuerdo de París (diciembre de 2015), se concluyó reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. ¿Ratificará España el Acuerdo?
La reunión del COP21 celebrado en París supone una nueva tendencia mundial con respecto a los temas medioambientales. Los retos de esta reunión eran, por un lado, lograr un nuevo acuerdo vinculante en sustitución del Protocolo de Kyoto, con objetivos revisables a la baja cada cinco años, que evite que el incremento de temperatura en la Tierra en el año 2100 supere los 2ºC; y, por otro lado, movilizar las fuentes de financiación para ayudar a cumplir los objetivos a los países más vulnerables.
El COP21 ha sido firmado por 187 países de los 195 asistentes, que representan el 95% de las emisiones del planeta, lo que da idea de la trascendencia que tendrá en el futuro. Su ratificación por los países se va realizan-do paulatinamente.
Según datos del año 2012, los principales sectores emisores de CO2 en el mundo son: la generación de electricidad, con un 34%; el transporte por carretera, con un 14%; el resto del transporte, con un 18%; y las industrias manufactureras y de construcción, con un 17% del total. Estos datos constatan la alta incidencia de la generación de electricidad en las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que a su vez depende de las fuentes de generación utilizadas.
En España, las centrales nucleares evitan anualmente entre 45 y 55 millones de toneladas de CO2, lo que representa el 14% de las emisiones que se producen en nuestro país por cualquier actividad. A la vista de esta situación, la Sociedad Nuclear Española considera fundamental, para el cumplimiento de los compromisos alcanzados en COP21, el funcionamiento a largo plazo de nuestras centrales nucleares.
Como hemos comentado, próximamente tendrá lugar la 42 Reunión Anual de la SNE. ¿Qué novedades habrá este año?
La Sociedad Nuclear Española, integrada por profesionales del sector nuclear, aplica a sus eventos la misma política de mejora continua que lleva a cabo en sus actividades. Cada año aprendemos del anterior y nos esforzamos en ser creativos para que los socios y participantes puedan sacar provecho de su asistencia. También intentamos acercarnos más a la ciudad que nos acoge, Santander en este caso, y hemos programado actividades para que la sociedad santanderina tenga la oportunidad de vivir con nosotros este evento, divulgando de esta forma el conocimiento nuclear, que es la base para entender y comprometerse positivamente con nuestra tecnología.
Para ello, además de la conferencia habitual de WIN que se impartirá en el Ateneo de Santander, de título ”La Tecnología Nuclear, una herramienta para curar” y el Curso también habitual de los Jóvenes Nucleares “Curso Básico de Ciencia y Tecnología Nuclear”, que se impartirá en la Universidad de Cantabria -ambos abiertos a la sociedad santanderina-, se celebrarán las tradicionales sesiones técnicas, con más de 400 ponencias, dos sesiones plenarias, monográficas y talleres. Este año 2016 dispondremos, además, de dos novedades: el Centro de Información sobre la energía nuclear y el funcionamiento de las centrales -que estará abierto a centros educativos y entidades de la ciudad, previa solicitud de visita- y la Sesión Especial de título “Energía Nuclear: su papel en la solución al cambio climático”, que estará presidida por el divulgador científico Manuel Toharia y que estará también abierta al público.
En cuanto a comunicación, hemos potenciado las redes sociales, especialmente twitter, generando un hashtag específico de la reunión, que deseamos que todos impulsemos: #42nuclearSNE. Esperamos contar y agradecemos la participación de nuestros socios, empresas y todos los profesionales del sector que, como siempre, enriquecerán el encuentro con sus aportaciones.
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