| AENOR es una entidad cada vez más dinámica y competitiva. ¿Qué valoración hace de la evolución desde que inició su etapa de transformación?
El Plan Estratégico 2018-2020 ha supuesto una transformación en activos muy importantes para AENOR, como son sus personas, la tecnología o la Marca. Sin ese decidido paso adelante no hubiéramos podido responder de la manera en que lo hemos hecho a una crisis como la provocada por la pandemia; con una agilidad y capacidad de adaptación que han demostrado nítidamente que el cliente está en el centro de cada una las acciones de la entidad.
Son tres los ejes clave de la transformación que está desarrollando AENOR: el abordaje de una transformación cultural basada en nuestro propósito -contribuimos a la transformación de la sociedad creando confianza entre organizaciones y personas-; por otro lado, los mercados demandan cada vez más agilidad y, en consecuencia, estamos trabajando para ser un referente en nuestra capacidad de respuesta con nuevos sistemas de información que digitalicen toda nuestra cadena de valor; y buscamos que nuestra Marca crezca como apoyo eficaz de los mensajes que nuestros clientes quieren trasmitir a la sociedad, reforzándolos con una confianza en su verificación y trazabilidad que sólo nosotros podemos aportar. Es por ello que hemos trabajado en el reposicionamiento de Marca.
Actualmente, estamos ultimando el Plan Estratégico 2021-2023 que, entre otros aspectos, continuará con la potenciación de nuestras capacidades en el campo de la operación, buscando mayor eficiencia.
La confianza es un catalizador de la economía, hasta el punto de que sin ella no pueden concebirse entornos económicos desarrollados. Si las diferentes partes de las cadenas de valor de una economía confían unas en otras, se generan transacciones de manera más rápida y con menores costes.
La entidad es una organización puntera en auditorías. Pero con la irrupción del coronavirus surge el concepto de auditoría en remoto. ¿No es necesaria la supervisión in situ? ¿Cómo se hace la parte presencial?
Una parte importante de nuestra respuesta a la crisis provocada por el COVID fue la potenciación de las auditorías en remoto en aquellos casos en que fuese posible sin perder el rigor que aprecian nuestros clientes; y una vez obtenido el permiso del regulador.
No podemos perder de vista que para generalizar el uso de las auditorías en remoto hay que tener en cuenta que su viabilidad depende del esquema que hay que auditar, del tipo de auditoría a desarrollar (ciclo de auditoría) y siempre en función de la carga documental que durante una auditoría tenga que ser revisada. En algunos esquemas certificables, y para garantizar la uniformidad en el ámbito global, los organismos responsables de estos referenciales definen sus propios criterios para abordar las auditorías, entre ellos la necesidad de visitas. Estos criterios deben ser seguidos por las entidades certificadoras; es el caso de certificaciones relacionadas con la seguridad alimentaria, por ejemplo.
La alternativa de las auditorías en remoto fue adoptada por bastantes organizaciones durante el confinamiento, ya que permitía no retrasar el proceso de auditoría y colocar a las organizaciones en una mejor posición para recuperar lo antes posible la actividad regular. Con el final del confinamiento se han ido recuperando las auditorías presenciales, pero una enseñanza muy importante ha sido la utilidad de las realizadas en remoto. Sin duda, es una opción destinada a permanecer, siempre dentro de unas condiciones que garanticen el rigor. Por ejemplo, en organizaciones en las que ya hemos comprobado su compromiso con las buenas prácticas.
Desde que se declaró la pandemia, numerosas empresas han certificado los protocolos frente al COVID-19. ¿Qué objetivo tiene esta herramienta? ¿A quién se dirige?
Es la certificación que más rápido ha crecido en la historia de AENOR. Desde el comienzo de esta situación se nos plantearon nuevos retos y desafíos urgentes y AENOR ha tratado de entroncar los productos y servicios con las necesidades del sector empresarial y social español.
La certificación de Protocolos frente alCOVID-19 que comentas se dirige a toda organización que desee respaldar ante sus usuarios, sus empleados y sus clientes que en sus instalaciones se están desarrollando prácticas eficaces para la gestión de los riesgos derivados del coronavirus. De esta forma, se apoya a las empresas en la vuelta a los centros de trabajo y a las actividades en los comercios e instalaciones de todo tipo.
La certificación se enmarca dentro de la Plataforma de Confianza “Vencer al COVID-19”. Ésta abarca productos y servicios que ayudan a gestionar esta situación y, al mismo tiempo, a retomar las rutinas diarias de trabajo, uso de transporte u ocio con mayor tranquilidad. Certificación de protocolos frente al COVID-19, certificación de mascarillas, marcado Logo CE para equipos de protección individual (EPIs), análisis de coronavirus en superficies o formación en modalidad Live Training son algunas de las soluciones que integran esta plataforma.
Además, muchas industrias están produciendo material de protección esencial (mascarillas, batas, guantes…), EPIs que han de tener el marcado CE. ¿Qué papel juega AENOR en esta certificación?
Tres son las líneas principales en lasque estamos trabajando: facilitamos la producción a la escala necesaria de Equipos de Protección Individual mediante el marcado CE; hemos incrementado nuestra capacidad para supervisar la producción de productos sanitarios en industrias de otros países -destacadamente China-; y prestamos servicios de inspección y control pre-embarque para productos que se exportan hacia España.
En este sentido, la Administración española confía en AENOR para respaldar que se recibe el material contratado tanto en términos de calidad como de cantidad. AENOR es una de las 8 empresas autorizadas por el gobierno chino para realizar inspecciones de productos allí.
Por otra parte, en materia de PRL, las organizaciones tienen que migrar las certificaciones OHSAS 18001 a la ISO 45001. ¿Qué plazo tienen para llevarlo a cabo?
En este aspecto también hay que hablar dela influencia de la crisis generada por el CO-VID. La fecha inicial prevista para que las organizaciones pudieran realizar esta migración estaba estipulada para el 11 de marzo de 2021. Debido a la pandemia, la International Accreditation Forum (IAF) amplió el plazo de migración de la OHSAS 18001:2007 ala ISO 45001: 2018 hasta el 30 de septiembre de 2021.
La sostenibilidad será un factor clave para la recuperación económica. Cuéntenos qué son los ODS y por qué es tan importante implantarlos en la estrategia empresarial.
La evolución de la vida empresarial es parte de la evolución de la sociedad y la preocupación por el entorno ha ido ganando fuerza en la agenda pública de forma paulatina. En 1987 ya aparece el concepto de “desarrollo sostenible” en el informe Brundtland elaborado por la Comisión de Naciones Unidas. Allí se define como “aquel desarrollo que asegura las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de futuras generaciones”.
Desde entonces, los valores predominantes en la sociedad, a los que responde el mercado, se encuadran en el contexto del desarrollo sostenible. Este mayor foco en la sostenibilidad como conjunto de principios y valores, que marcan el desarrollo empresarial, se ha traducido recientemente en la definición de diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (conocidos por sus siglas ODS).
Se trata de la fuente de mayor consenso que existe hoy en día sobre sostenibilidad. Desde estos ODS, los grupos de interés -sobre todo clientes e inversores- marcan la agenda de las normas y estándares comunes a las organizaciones empresariales.
En la actualidad, los agentes implicados en la recuperación de la crisis ocasionada por el COVID-19 resaltan que los ODS proporcionan el marco para la recuperación. En este sentido, la Organización delas Naciones Unidas considera que las empresas son un agente clave para la consecución de estos ODS, por lo que es necesario que los incorporen en su estrategia empresarial y emprendan la acción tan pronto como sea posible. Además, la Unión Europea ha impuesto que para acceder a los fondos de recuperación, los proyectos que se beneficien de ellos tienen que cumplir uno ovarios de los siguientes criterios: sostenibilidad medioambiental, sostenibilidad social, digitalización y cohesión interterritorial.
En este contexto, AENOR ha desarrollado un modelo de certificación que ayuda a las empresas a analizar y certificar la contribución de su estrategia de sostenibilidad sobre los ODS que apliquen a su campo de actividad. Nuestro objetivo es que se fomente la contribución empresarial a los ODS, siendo aplicable para todo tipo de organizaciones y sectores.
AENOR está cada vez más comprometida con la economía circular. ¿Qué cursos ofrecen yen qué modalidad?
Tanto en la formación como en las publicaciones y ventas de normas ofrecemos una amplia variedad de soluciones. En el campo de la Formación, la economía circular dispone de hecho de una página específica en su catálogo de este año con una amplia oferta formativa, como el Posgrado Experto en Gestión ambiental, energética y Economía Circular; Cursos específicos sobre el cálculo de huellas, la reducción y compensación de emisiones; y Formaciones de especialización en economía circular(ecoetiquetado, DAP, ciclo de vida…).
En cuanto a la venta de normas y publicaciones, disponemos de un libro específico, la “Guía práctica para implementar la economía circular en las PYMES” con indicaciones y casos prácticos para establecer una estrategia sostenible de desarrollo. Y, finalmente, en el terreno de la venta de normas relacionadas con la economía circular y soluciones sectoriales, disponemos de más de medio centenar de ellas, desde aquellas relacionadas con los gases de efecto invernadero o la huella de carbono de productos hasta normas sobre plásticos reutilizables y reciclables. |